Cirugía de la Vesícula y la Vía Biliar
¿Cuándo hay que extirpar la Vesícula?
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Si hay piedras que producen dolor al paciente en forma de cólicos, inflamación de la vesícula con o sin infección (colecistitis).
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Cuando aparece ictericia (coloración amarillenta de la piel y mucosas) debida a un aumento de la bilirrubina en sangre.
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Si se inflama la glándula pancreática (pancreatitis) por algún pequeño calculo enclavado en el conducto pancreático.
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En el caso de aparecer cáncer en la vesícula.
¿Qué es la Vesícula Biliar?
La vesícula biliar es un pequeño órgano con forma de pera que se encuentra adherido a la superficie inferior del hígado y que sirve para almacenar y concentrar la bilis. La bilis se produce en el hígado y es transportada a través de pequeños conductos al duodeno (intestino delgado). La vesícula a su vez, vierte en el duodeno la bilis cuando ingerimos comida, en especial grasas, y sirve de “detergente” para que las podamos digerir.
Se conoce como colecistectomía a la técnica utiliza para extirpar la vesícula.
Esta cirugía es realizada con anestesia general y tiene una duración media entre 30 y 90 min. En pacientes que han padecido varios episodios de inflamación con antelación, la cirugía puede ser más dificultosa y prolongarse en el tiempo.
Al realizarse por técnicas mínimamente invasivas como la cirugía laparoscópica, la mayoría de los pacientes se pueden ir a casa tras 12h de la intervención.
Es de vital importancia, como en cualquier cirugía, el postoperatorio, evitando hacer esfuerzos físicos al menos durante 3-4 semanas. Una vez quitados los puntos se puede hacer vida normal.
Durante el primer mes postoperatorio se recomienda evitar comidas copiosas ricas en grasas, posteriormente, puede seguir una dieta saludable habitual.